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Informe advierte que no se ha implementado la certificación nacional de oro formal. Lee el documento completo.
La evaluación de la implementación de la Política Nacional para la Pequeña Minería y Minería Artesanal durante 2024 revela un balance parcialmente positivo, con avances en sostenibilidad socioambiental y fortalecimiento de capacidades, aunque persisten desafíos para consolidar la formalización del sector de cara al 2030.
Avances destacados
Entre los logros identificados se encuentra la reducción del índice de accidentabilidad, el aumento de mineros con instrumentos de gestión ambiental aprobados y la capacitación de más de 3,000 mineros y 400 funcionarios regionales. Asimismo, se inició el fortalecimiento institucional a través del Sistema de Información para la Pequeña Minería y Minería Artesanal (SIPMMA) y los programas de formación para las Direcciones y Gerencias Regionales de Energía y Minas (DREM/GREM).
Estos resultados evidencian efectos concretos y medibles, especialmente en los ámbitos de seguridad laboral y gestión ambiental, contribuyendo a un mayor nivel de sostenibilidad en la pequeña minería y minería artesanal.
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Retos pendientes
El informe advierte también sobre limitaciones significativas:
- No se ha implementado la certificación nacional de oro formal
- Existen dificultades en la intermediación de contratos y servidumbres
- Retrocesos en indicadores de competencias y trazabilidad,
- Una débil apropiación de la política por parte de algunos sectores, lo que dificulta la articulación interinstitucional.
Estas brechas impiden la integralidad de la política y reducen su capacidad de impacto en el corto plazo.
Recomendaciones
La Dirección General de Formalización Minera plantea una serie de medidas para garantizar la consecución de los objetivos hacia 2030:
- Fortalecer la gobernanza interinstitucional, con la creación de un Grupo de Trabajo para coordinar y monitorear los 19 servicios de la política.
- Asegurar la participación efectiva de los sectores, mediante la designación de personal de planta y tomadores de decisión en cada entidad.
- Ampliar las fuentes de financiamiento, articulando recursos nacionales e internacionales que fortalezcan la capacidad operativa.
- Consolidar la integralidad de la política, priorizando la certificación nacional de oro formal, la intermediación de contratos y la consolidación del SIPMMA.
Balance general
En síntesis, el documento concluye que la política ha generado impactos positivos en sostenibilidad y seguridad, pero que para consolidar sus resultados será necesario acelerar la ejecución de servicios pendientes, fortalecer la coordinación interinstitucional y garantizar intervenciones sostenibles en el territorio.