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Trump prioriza inversiones directas en empresas mineras de tierras raras.
La administración del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció que reforzará su presencia en sectores mineros estratégicos, como parte de una nueva política industrial orientada a asegurar el suministro de minerales críticos. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, señaló que el gobierno pasará de otorgar subsidios a participaciones directas de capital en compañías clave vinculadas a la extracción y refinación de metales esenciales.
“Frente a una economía no de mercado como China, Estados Unidos debe aplicar una política industrial firme y estratégica”, declaró Bessent en una entrevista con CNBC, subrayando que las recientes restricciones de Pekín a la exportación de tierras raras e imanes revelan la urgencia de una respuesta estructural.
Minería estratégica y control estatal
El gobierno estadounidense ya ha tomado participaciones en empresas como MP Materials (principal productora de tierras raras en Norteamérica) y Trilogy Metals, dedicada al desarrollo cuprífero en Alaska. Además, se prevé el establecimiento de reservas estratégicas de minerales críticos, así como precios mínimos de referencia para estimular la inversión y proteger la producción local.
Bessent indicó que la política se concentrará en siete industrias clave, entre las que figuran minerales estratégicos, acero, semiconductores y defensa, todos considerados pilares de la seguridad nacional.
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Tierras raras y transición energética
El foco del Tesoro recae en el fortalecimiento de la minería de tierras raras, insumo indispensable para la electromovilidad, la energía renovable y la industria militar.
Estados Unidos busca reducir su dependencia de China, que controla más del 60% del procesamiento global de estos materiales y ha usado restricciones de exportación como herramienta geopolítica.
La medida forma parte de un esfuerzo coordinado para reindustrializar la cadena de valor minera, reactivar la exploración interna y financiar nuevos proyectos cupríferos y polimetálicos.
Hacia una minería de seguridad nacional
La política de participación estatal también apunta a fortalecer la base tecnológica y de procesamiento de minerales críticos, un eslabón débil en la cadena minera norteamericana. “El objetivo es garantizar que EE. UU. pueda desarrollar y procesar sus propios minerales estratégicos con independencia tecnológica”, precisó Bessent.
El Departamento del Tesoro anticipa que las inversiones podrían impulsar un incremento del 25% en la producción local de metales estratégicos hacia 2030, consolidando a América del Norte como un bloque competitivo frente al dominio asiático.
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