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La compañía destinará la mayor parte de su programa de capital de US$ 15,000 millones al desarrollo de Tía María, Los Chancas y Michiquillay, consolidando a Perú como eje estratégico de su crecimiento.
Southern Copper Corporation (NYSE y BVL: SCCO), una de las mayores productoras de cobre del mundo, anunció en su reporte del tercer trimestre de 2025 un plan de inversión superior a US$ 15,000 millones para la presente década, de los cuales US$ 10,300 millones estarán dirigidos a proyectos en el Perú.
El presidente del directorio, Germán Larrea, destacó que la apertura del gobierno peruano y la estabilidad institucional son pilares para mantener la confianza de los inversionistas internacionales en el sector minero peruano. Según el documento, los proyectos en cartera generarán polos de desarrollo regional, empleo local y un mayor flujo tributario a las arcas nacionales
Tía María impulsa la reactivación minera en el sur del país
El Proyecto Tía María (Arequipa) lidera el portafolio de expansión de Southern Copper. Con una inversión total de US$ 1,802 millones, la iniciativa alcanzó un avance físico del 23% al cierre de septiembre y ya generó 2,109 puestos de trabajo, de los cuales más del 38% son ocupados por trabajadores locales.
Al entrar en operación, Tía María producirá 120,000 toneladas de cátodos de cobre anuales, generando US$ 18,200 millones en exportaciones y US$ 3,800 millones en impuestos y regalías durante sus primeros 20 años de vida útil.
Además, la compañía recibió en octubre la autorización del Ministerio de Energía y Minas para iniciar las actividades de explotación, lo que marca un paso decisivo hacia la puesta en marcha del proyecto en 2027.
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Los Chancas y Michiquillay consolidan la cartera cuprífera del Perú
En el norte del país, Los Chancas (Apurímac) representa una inversión estimada de US$ 2,600 millones y prevé iniciar operaciones entre 2030 y 2031, con una producción anual de 130,000 toneladas de cobre y 7,500 toneladas de molibdeno.
El proyecto avanza en sus programas de gestión social y ambiental, mientras la compañía trabaja en la recuperación del control del área afectada por la presencia de mineros ilegales.
Por su parte, el proyecto Michiquillay (Cajamarca) —uno de los más grandes depósitos de cobre en desarrollo del país— requerirá US$ 2,500 millones en inversión. Con recursos inferidos de 2,288 millones de toneladas y una ley de 0.43% de cobre, se espera que inicie operaciones en 2032, con una producción anual de 225,000 toneladas.
Proyección de crecimiento sostenido
El flujo de efectivo operativo de Southern Copper ascendió a US$ 1,559 millones durante el tercer trimestre y las inversiones de capital totalizaron US$ 349 millones, equivalentes al 31.5% de la utilidad neta.
Con un costo en efectivo de apenas US$ 0.42 por libra, la minera mantiene una de las estructuras de costos más competitivas del sector, fortaleciendo la rentabilidad de sus operaciones en Perú.
El portafolio de Southern Copper en el país no solo impulsa la producción de cobre, sino que contribuye directamente al desarrollo económico regional mediante obras por impuestos y programas sociales. En Arequipa, por ejemplo, la empresa financia la modernización de un colegio emblemático en Cocachacra y la construcción de un laboratorio biomédico en la Universidad Nacional de San Agustín, beneficiando a más de 3,000 estudiantes.
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Análisis de inversión minera en Perú
El avance de los proyectos de Southern Copper confirma la recuperación del flujo de capital minero en el país, luego de varios años de postergación de grandes proyectos.
Con más de US$ 10,000 millones en inversiones comprometidas, la compañía consolida a Perú como su principal centro de expansión cuprífera a nivel mundial, garantizando estabilidad de oferta en un mercado global marcado por la creciente demanda de cobre para energías limpias y electromovilidad.