Enlace original:

https://www.rumbominero.com/peru/noticias/noticias-energia/autoconsumo-energetico-impulsa-el-cambio-hacia-la-independencia-electrica-en-el-peru/

El modelo fotovoltaico gana terreno por su rentabilidad y sostenibilidad, aunque aún requiere incentivos y un marco regulatorio más claro.

El autoconsumo energético se perfila como una de las principales tendencias del sector eléctrico peruano, al permitir que empresas e instituciones generen su propia energía mediante sistemas fotovoltaicos. Este modelo no solo reduce los costos operativos, sino que también disminuye la huella de carbono y mejora la sostenibilidad corporativa. La baja de los costos tecnológicos y la necesidad de independencia energética están impulsando su crecimiento en el país.

“El autoconsumo representa una oportunidad concreta para las empresas que buscan reducir su dependencia del sistema eléctrico y avanzar hacia un consumo más responsable. No se trata solo de una tendencia tecnológica, sino de un cambio de mentalidad respecto al uso eficiente de la energía”, señaló Roberto Tamayo, exdirector general de Electricidad del Ministerio de Energía y Minas (Minem).

El especialista explicó que, aunque la inversión inicial en paneles solares puede ser elevada, el retorno se logra entre cuatro y siete años, con una vida útil superior a los 25. Esto se traduce en energía gratuita durante gran parte del ciclo de operación. Sin embargo, Tamayo advirtió que persisten retos importantes, como la ausencia de un marco normativo operativo y la falta de financiamiento accesible para pequeñas y medianas empresas, factores que frenan su expansión.

¿Qué potencial tiene el autoconsumo solar en el Perú?

Experiencias internacionales, como la de España, muestran que los incentivos fiscales y la simplificación de trámites son claves para acelerar la adopción del autoconsumo. Replicar estos modelos, afirma Tamayo, permitiría al Perú aprovechar mejor su abundante radiación solar y fortalecer su matriz energética. De acuerdo con las proyecciones del sector, la capacidad operativa de energía solar nacional podría superar los 2,250 MW hacia 2026, cuadruplicando la actual y consolidando la transición hacia una energía más limpia y descentralizada.